Los incendios forestales son un problema de salud pública cada vez mayor debido al humo que producen y al hecho de que los incendios se producen con mayor frecuencia, algo que está relacionado con el cambio climático y sucede a nivel mundial.
Las poblaciones susceptibles, como los niños o los ancianos, son por lo general más vulnerables a cualquier evento de contaminación atmosférica aguda, como un incendio forestal, pero no se sabe lo suficiente sobre qué efectos puede tener un incendio en una persona expuesta a niveles altos de humo de incendios forestales porque viven cercas de áreas donde se producen esos incendios, o incluso para aquellos que viven más alejados de esas áreas, pero respiran igualmente el humo, que puede viajar lejos.
Los científicos relacionados con el Centro de Ciencias de Salud Ambiental (EHSC) estudian cómo puede afectar un nivel agudo y crónico de humo causado por incendios forestales a un número creciente de la población. En esta sección intentamos, además, aportar herramientas útiles para que puedas protegerte.